Semana 29 de embarazo
Tu bebé es del tamaño de una
calabaza mediana
Semana 29 de embarazo: desarrollo del bebé
¡Tu bebé se está preparando para conocerte! Ha comenzado a ganar peso más rápidamente. Durante los últimos meses del embarazo seguirá engordando y probablemente duplicará su peso actual. Aunque la mayor parte del cuerpo y los órganos se han desarrollado casi por completo, es posible que los pulmones no estén completamente listos para salir del útero. Puede que notes que tu pequeño da patadas más fuertes con mayor frecuencia, ya que le cogerá el gusto a cambiar de posición. En la semana 29 de embarazo el médico suele recomendar que cuentes los movimientos fetales una vez al día para comprobar si el bebé se desarrolla y mueve con normalidad. Hay muchas herramientas en Internet que pueden ayudarte a registrar el movimiento de tu bebé. ¿Te preguntas de cuántos meses estás en la semana 29 de embarazo? Dado que el embarazo no se divide en meses exactos, podríamos decir que estás a punto de llegar al octavo. Para saber más sobre cómo se desarrollará tu pequeño en las próximas semanas, sigue leyendo sobre el tercer trimestre.
¿Qué tamaño alcanzará el feto durante la semana 29 de embarazo?
En la semana 29 de embarazo el tamaño del feto será similar al de una calabaza pequeña. Echa un vistazo a esta imagen para saber qué posición puede tener tu bebé en la semana 29 de embarazo.
El cuerpo de la madre en la semana 29 de embarazo
En estos momentos es esencial comer de forma saludable para que el bebé crezca adecuadamente. Dos nutrientes importantes son el hierro y el calcio. El hierro ayuda al organismo a mantener y reponer los glóbulos rojos, que se encargan de transportar el oxígeno por todo el cuerpo y evitan la anemia. Las futuras madres deben ingerir al menos 30 mg de hierro al día, que se encuentra en alimentos como el hígado de ternera o cerdo, las alubias, los cereales integrales enriquecidos y la avena. El médico controlará tus niveles de hierro y te recetará un suplemento si es necesario. El calcio también es muy importante. No solo fortalece los huesos y los dientes de tu hijo, sino que también contribuye a su crecimiento. Deberás tomar unos 1000 mg de calcio al día (1300 g si tienes menos de 19 años). Puedes obtener esa cantidad en unas rebanadas de pan integral o con queso, brócoli y yogur. En general, durante el último trimestre tendrás que ingerir unas 450 calorías adicionales al día. Lo más normal es que el aumento de peso sea de aproximadamente 0,5 kg a la semana desde ahora hasta el final del embarazo (es decir, aproximadamente 5,5 kg), siempre que tu IMC se encontrase en el rango normal antes del embarazo y que des a luz a las 40 semanas.
Calculadora de Aumento de Peso durante el Embarazo
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Semana 29 de embarazo: síntomas
Estos son los síntomas que puedes tener durante la semana 29 de embarazo:
Varices. Si observas unas venas azules abultadas en las piernas que duelen o pican, puede que sean varices. Suelen aparecer porque el útero ejerce presión sobre las venas principales que transportan la sangre desde la parte inferior del cuerpo hasta el corazón. Es más probable que tengas varices si no es tu primer embarazo o son comunes en tu familia. Aunque tengan un aspecto desagradable, no suelen ser un problema médico. Para aliviar las molestias intenta no estar sentada o de pie durante mucho tiempo y pon los pies en alto siempre que puedas para mejorar la circulación. El uso de medias de compresión también puede ayudar, pero debes asegurarte de que el estilo que elijas no te aprieta en el muslo ni la rodilla.
Fatiga. Si últimamente te sientes agotada, debes saber que es normal en esta etapa del embarazo. Tu cuerpo está trabajando constantemente para alimentar y mantener al bebé, lo que requiere bastante energía. También es posible que te resulte difícil dormir bien por las noches. Aprovecha cualquier oportunidad para descansar, aunque solo sean 15 minutos. En la semana 29 de embarazo puedes probar a dormir con una almohada debajo de la tripa. Si nada te lo impide, sigue haciendo ejercicio para mantener tus niveles de energía altos.
Calambres en las piernas. Los calambres es las piernas son una dolencia común durante el embarazo. Los médicos no están seguros de cuál es su causa, pero es posible que te despiertes por las noches debido a esta molesta sensación. Para evitarlos o aliviar las molestias, intenta estirar las piernas antes de acostarte. Si notas un calambre, flexiona el pie hacia arriba y vuelve a apuntar con él hacia abajo unas cuantas veces. También puedes darte un masaje suave en las pantorrillas.
Falta de aire. Ver a tu bebé por primera vez puede dejarte sin aire, pero hasta que llegue ese momento también puedes sentir algún tipo de dificultad respiratoria. En esta etapa del embarazo el útero no deja mucho espacio para el resto de órganos en el abdomen, por lo que el estómago y el diafragma ejercen presión sobre los pulmones. Como consecuencia, tus pulmones no tienen sitio para expandirse. Mantén una buena postura para corregir el problema. Para recobrar el aliento, intenta moverte más despacio y no te esfuerces demasiado. Si sientes algún dolor en el pecho en la semana 29 de embarazo, es un síntoma que no debes ignorar. Consulta al médico para que te aconseje.
Semana 29 de embarazo: consejos
Si te sientes un poco estresada en estos momentos, quizás te apetezca probar algunas técnicas de relajación. Aunque es normal que haya algo de estrés debido al embarazo, no deberías sentirte así a diario. Dos buenas opciones son el yoga prenatal y la meditación. El médico puede darte más información sobre cómo practicarlos de forma segura durante el último trimestre. Aprender a relajar el cuerpo y la mente durante la semana 29 de embarazo te ayudará a reducir la tensión arterial o muscular y aliviar el dolor lumbar. Te sentirás más cómoda durante los meses que quedan hasta dar a luz. Otros métodos para combatir el estrés son recibir un masaje, escribir en un diario o escuchar tu música favorita mientras descansas.
Existen varios métodos de preparación al parto que, según los expertos, son muy útiles. Entre ellos, se encuentran el método Lamaze, el método Bradley y el método Read. Es posible que quieras obtener más información sobre ellos, ya que pueden ayudarte a controlar el dolor y la ansiedad durante el parto mediante técnicas de relajación y respiración. Asistir a una clase de preparación al parto es una gran opción, ya que se suelen enseñar dichas técnicas. Consulta al médico para encontrar opciones en tu zona. En Internet hay varios vídeos gratuitos de preparación al parto.
¿Sabes ya dónde darás a luz? Si es así, es posible que tu hospital o clínica de maternidad te permitan hacer una visita a sus instalaciones antes de la fecha de parto. Además, puedes aprovechar para calcular la ruta más rápida y comprobar el aparcamiento y las entradas. Durante la visita puedes preguntar las normas al personal del hospital, como quién puede entrar en la sala de partos y si está permitido hacer fotografías o vídeos.
¿Has decidido quién quieres que esté contigo en el parto? Tu acompañante puede ser tu pareja, un amigo íntimo o un familiar. Su función es muy importante durante el proceso, ya que puede hacerte compañía, darte masajes y animarte. También te recordará las técnicas de relajación y respiración que hayas aprendido en las clases prenatales. Además, puede hablar con el médico o la matrona para que entiendan tus preferencias, lo que te dará una mayor sensación de control sobre lo que ocurre. Te recomendamos comentarle tus preferencias y sentimientos sobre el parto con antelación.
Piensa cómo vais a gestionar el cuidado del bebé, sobre todo si tu pareja y tú vais a volver a trabajar. Hay varias opciones, desde guarderías hasta el cuidado en el hogar. Cada una de ellas tiene sus propios costes y condiciones de disponibilidad, por lo que es mejor investigar y hacer los ajustes necesarios antes de que llegue tu pequeño. Así tendrás una cosa menos por la que preocuparte cuando comiences a cuidar de él. Si este no es tu primer hijo, es posible que quieras organizar el cuidado de los mayores cuando te pongas de parto o durante los primeros días de vida del bebé.
La persona encargada de organizar el baby shower te pedirá pronto la lista de regalos para incluirla junto a las invitaciones.
Semana 29 de embarazo: consultar al médico
¿Cuándo se desarrollará completamente el bebé y estará listo para salir al mundo?
¿Debo contar las patadas? ¿Cómo debo hacerlo?
¿Qué probabilidades hay de que necesite una episiotomía (un pequeño corte en el perineo, entre la vagina y el ano) si tengo un parto vaginal? ¿En qué consiste y por qué se ofrece?
¿Se recomienda redactar un plan de parto?
¿Cuáles son algunos de los síntomas de la semana 29 de embarazo? ¿En qué casos debería llamar al médico?
¿Con qué frecuencia debo acudir a las revisiones desde este momento hasta el parto
¿Tengo alguno de los factores de riesgo para padecer preeclampsia? ¿A qué signos de alarma debo prestar atención?
¿Se recomienda hacer una ecografía 3D o 4D? ¿Cuándo sería el mejor momento?
Semana 29 de embarazo: cosas que debes hacer
Pregunta en tu lugar de trabajo los trámites que debes realizar antes de cogerte la baja por maternidad. También puedes crear un plan para delegar gradualmente tus tareas.
Lee sobre los cuidados prenatales típicos del tercer trimestre y consulta al médico para saber más sobre las revisiones y pruebas que puedes solicitar en las próximas semanas.
Programa una visita al hospital o la clínica de maternidad.
Prepara la habitación del bebé con todo lo necesario.
Elige o empieza a diseñar una forma de anunciar el nacimiento de tu hijo. Puede que quieras imprimir tarjetas tradicionales para enviarlas a familiares y amigos o diseñar un anuncio para compartir la feliz noticia por correo electrónico o en redes sociales.
¿No sabes qué productos debes comprar o añadir a la lista de regalos? Puedes preguntar a otras personas para saber cuáles recomiendan y por qué.
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Semana 29 de embarazo - checklist
La información de este artículo se basa en los consejos de expertos y se extrae de fuentes médicas y gubernamentales fiables, como la American Academy of Pediatrics y el American College of Obstetricians and Gynecologists. El contenido de esta página no debe reemplazar el consejo médico de un profesional. Consulta a un profesional médico para obtener un diagnóstico y un tratamiento completos.